La vuelta al mundo en ochenta días

Hemos empezado el Proyecto de Trabajo que vamos a desarrollar este durante  seis semanas del 2º trimestre, con la lectura de los primeros capítulos de este libro, uno de mis favoritos de todos los tiempos, que lleva conmigo más de cuarenta años.

La 1ª edición realizada por esta editorial, data de 1957, aunque yo lo leí, por 1ª vez hacia  1967

Las carcomas, o polillas, que había en la casa donde nací, se dieron un buen festín con las páginas de mi libro

De todas las características de la personalidad, Phileas Fogg, el protagonista de esta novela, la que más nos interesa, como estudiantes de Geografía es que: ¡Se conocía el Mapamundi de memoria!
Y no solo es que se supiera los nombres de los países, ciudades, pueblos, o de los mares y océanos, ríos, montes, lagos, cabos, golfos... ¡Es que se conocía sus características: climas, paisajes, fauna y flora, costumbres de los pueblos que habitaban ciertas regiones...

¿Te imaginas saberte todos estos lugares de memoria?

Al comienzo de la historia, Phileas Fogg apuesta la mitad de su fortuna, unas veinte mil libras esterlinas (20.000 ₤) a que será capaz de dar la vuelta al mundo en ochenta días siguiendo el itinerario que propone el Morning Chronicle, uno de los periódicos que este misterioso personaje lee cada día en el Reform Club de Londres.
Cabe suponer que no le parece tan descabellado, el itinerario; sin embargo, estoy convencida de que podría hacerse en menos tiempo, incluso con los medios del siglo XIX. 

Itinerario de Phileas Fogg

Es decir, este año, nuestro proyecto, intentará ofrecer una ruta alternativa más rápida. 
Para poder aceptar este desafío, primero tendremos que averiguar todo lo que podamos sobre la ruta original, y luego, buscar nuestra alternativa.